Diferencias entre Stablecoins y CBDCs
Con la que se está liando en todas partes con las CBDCs, hay que mirar las diferencias entre ambas.
Por Héctor Pérez
Desde que Satoshi escribió la última línea de código y le dió a enter, se ha liado parda en el mundo de las finanzas. En la última década, el auge de las criptomonedas y la tecnología blockchain ha revolucionado la forma en que percibimos y utilizamos el dinero. Dentro de este ecosistema digital, dos conceptos se han vuelto especialmente relevantes: las Stablecoins y los CBDCs (Central Bank Digital Currencies, por sus siglas en inglés). En este artículo, exploraremos las principales diferencias entre estas dos categorías de monedas digitales y su impacto en los sistemas financieros globales para que no te la cuelen.
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¿Qué son las Stablecoins?
Las Stablecoins son criptomonedas diseñadas para mantener una paridad estable con una moneda fiduciaria, como el dólar estadounidense o el euro. Su objetivo principal es resolver la volatilidad inherente de las criptomonedas tradicionales como Bitcoin y Ethereum. Las Stablecoins logran estabilidad mediante el respaldo de activos colaterales, reservas fiduciarias o algoritmos sofisticados.
A día de hoy, las Stablecoin tienen un mercado enorme, solo hace falta ver las capitalizaciones de las dos principales monedas. Cierto es, hay una gran concentración entre los dos principales players.
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Tipos de Stablecoins
Existen tres tipos principales de Stablecoins: respaldadas por activos, respaldadas por reservas fiduciarias y respaldadas por algoritmos. Las Stablecoins respaldadas por activos se apoyan en una reserva de activos tangibles, como oro o divisas extranjeras. Las Stablecoins respaldadas por reservas fiduciarias cuentan con una cantidad equivalente de moneda fiduciaria en custodia para respaldar su valor. Por último, las Stablecoins respaldadas por algoritmos utilizan mecanismos de oferta y demanda para mantener su estabilidad.
¿Qué son las CBDCs?
Las CBDCs son monedas digitales emitidas y respaldadas por los bancos centrales de un país. Difieren de las Stablecoins en que son emitidas y controladas por la autoridad monetaria de un país, mientras que las Stablecoins son creadas y gestionadas por entidades privadas.
Tipos de CBDCs
Existen dos tipos de CBDCs: minoristas y mayoristas. Los CBDCs minoristas se emiten directamente a los ciudadanos y están destinados a ser utilizados para transacciones cotidianas. Por otro lado, los CBDCs mayoristas están destinados a instituciones financieras y se utilizan principalmente para liquidaciones y pagos interbancarios.
Diferencias más importantes entre Stablecoins y CBDCs
Emisor
La principal diferencia entre las Stablecoins y los CBDCs radica en el emisor. Las Stablecoins son emitidas por entidades privadas, como empresas de tecnología financiera o consorcios, mientras que los CBDCs son emitidos por los bancos centrales de un país.
Control
Mientras que las Stablecoins hacen vida en blockchains públicas y transparentes, lo cual da acceso a todo el mundo que quiera a auditar el código que las emite (que no las reservas), las CBDCs probablemente hagan vida en sistemas opacos centralizados en los Bancos Centrales. Es precisamente este detalle uno de los más polémicos ya que, en teoría, el emisor de las CBDCs podría controlar cómo usas el dinero.
Regulación
Otra diferencia importante es el grado de control y regulación. Los CBDCs están sujetos al control y la supervisión de los bancos centrales, ergo, que evidentemente estos harán las normas para que sus CBDCs “estén dentro de la normativa”. En contraste, las Stablecoins, de momento, no están tan reguladas aunque ya en Europa se está trabajando en una “segunda edición de MiCA” para dar una mejor forma a la regulación de este tipo de instrumentos.
Respaldo
Las Stablecoins utilizan diferentes métodos de respaldo para mantener su estabilidad, como activos tangibles, reservas fiduciarias o algoritmos. Por otro lado, los CBDCs están respaldados directamente por la autoridad y la credibilidad de los bancos centrales, que hablando entrenos, no es que tengan mucha últimamente.
Privacidad y anonimato
Las Stablecoins y los CBDCs también difieren en cuanto a la privacidad y el anonimato. Las Stablecoins, dependiendo de su diseño, pueden ofrecer cierto grado de anonimato en las transacciones. Por otro lado, todavía no está claro el nivel de privacidad que las principales CBDCs tendrán. En palabras de la jefa del Banco Central Europeo, por ejemplo, la CBDC del euro no tendrá el mismo nivel de anonimato que el efectivo.
Alcance y adopción
Dado que las Stablecoins son creadas y gestionadas por entidades privadas, su alcance y adopción dependen de la confianza y la aceptación del mercado. Los CBDCs, por su parte, tienen un alcance potencialmente, en principio, más amplio debido al alcance de los Bancos Centrales en el sistema financiero.
Conclusiones
Las Stablecoins y los CBDCs representan dos enfoques diferentes para la digitalización del dinero. Mientras que las Stablecoins buscan resolver la volatilidad de las criptomonedas mediante respaldos y algoritmos, los CBDCs buscan mantener el control y la estabilidad de la moneda digital a través de la emisión y regulación centralizada. Ambos modelos tienen ventajas y desafíos únicos, y es probable que coexistan en el futuro de los sistemas financieros globales.
Lo que sí está claro, sin que me queden pelos en la lengua, es que la mayor diferencia entre las CBDCs y las Stablecoins reside en que las primeras serán impuestas y las segundas adoptadas, voluntariamente, por el mercado; lo que en otras palabras se traduce en que el en el caso de las Stablecoins el individuo será capaz de elegir la que mejor satisfaga sus necesidades.
